En esta entrada, queremos contarles que la historia de Kuma vuelve a comenzar, con un inicio feliz.
Luego de sacar avisos en periódicos zonales de Luján, Kuma consiguió adoptante, el Sr. Oscar Losada, fue el elegido entre varios, y luego de nuestra visita la semana pasada a Luján, comprobamos que Kuma y Oscar son el uno para el otro como ven en la foto.
En una semana (lo que dejamos pasar para hacer la visita) Kuma recuperó peso rápidamente (le dan casero) y además ya reconoce en Oscar a su padre-líder, algo que era muy importante. Queremos destacar que Oscar tiene un manejo ideal de Kuma, firme y afectuoso, lo que Kuma justamente necesitaba.
Kuma ahora vive suelto en el terreno aledaño a la parrilla que tiene Oscar, está todo el día con él, incluso Oscar lo saca a pasear con correa, un detalle... cuando llegamos le estaba poniendo la pipeta para las garrapatas, y nos mostró orgulloso el cepillo que le había comprado. Nosotras le llevamos en nombre de todos la chapas identificatorias para el perro, una buena correa y pipeta.
En el viaje de vuelta para Buenos Aires, recibimos un mensaje de texto en el celular, era Oscar en nombre de Kuma, y decía:
" HOLA, SOY KUMA, GRACIAS POR ACORDARTE SIEMPRE DE MÍ, QUEDATE TRANQUILA, QUE ESTOY MUY FELIZ..."
Luego de sacar avisos en periódicos zonales de Luján, Kuma consiguió adoptante, el Sr. Oscar Losada, fue el elegido entre varios, y luego de nuestra visita la semana pasada a Luján, comprobamos que Kuma y Oscar son el uno para el otro como ven en la foto.
En una semana (lo que dejamos pasar para hacer la visita) Kuma recuperó peso rápidamente (le dan casero) y además ya reconoce en Oscar a su padre-líder, algo que era muy importante. Queremos destacar que Oscar tiene un manejo ideal de Kuma, firme y afectuoso, lo que Kuma justamente necesitaba.
Kuma ahora vive suelto en el terreno aledaño a la parrilla que tiene Oscar, está todo el día con él, incluso Oscar lo saca a pasear con correa, un detalle... cuando llegamos le estaba poniendo la pipeta para las garrapatas, y nos mostró orgulloso el cepillo que le había comprado. Nosotras le llevamos en nombre de todos la chapas identificatorias para el perro, una buena correa y pipeta.
En el viaje de vuelta para Buenos Aires, recibimos un mensaje de texto en el celular, era Oscar en nombre de Kuma, y decía:
" HOLA, SOY KUMA, GRACIAS POR ACORDARTE SIEMPRE DE MÍ, QUEDATE TRANQUILA, QUE ESTOY MUY FELIZ..."